lunes, 18 de septiembre de 2017

Acuérdate

Y acuérdate de cada vez 
que me dijiste "te quiero",
de cada palabra,
de cada silencio. 

Acuérdate de todas las madrugadas 
en las que trataba de beberme tus gritos, 
las tardes en las que daba cobijo a tu desconsuelo y desesperanza,
las noches que mecía tu hastío, 
tus lágrimas y tu rabia. 

Acuérdate de que vivimos, que nos reímos 
y que fuimos,
sin importar el rumbo, las piedras,
las caídas,
sin poner meta a esta carrera 
que los biólogos
llaman vida.

Acuérdate de cada nota, 
acorde y melodía.
De cada imagen, 
de cada fotografía. 

Acuérdate de la última despedida,
del abrazo que se clavó
en la cavidad pericárdica 
y que ha dejado secuelas
que pueden contarte mis lagrimales
cada vez que recuerdan.

Acuérdate de aquellos días 
en los que nos creímos invencibles,
aquellos en los que luchamos
contra viento y marea.

Acuérdate de todos aquellos versos,
estrofas y poemas
en los que fuiste protagonista
de una historia sin límites
ni fronteras.

Acuérdate.

Acuérdate porque quizá si había meta,
nos tiró el viento
o quizá fue la marea.

Acuérdate porque quizá pusimos límites,
construimos muros
y delimitamos fronteras.

Acuérdate porque quizá estos sean mis últimos versos,
estrofas,
quizá este sea
mi último poema.

Acuérdate de que ocupé un espacio,
un lugar 
y un tiempo
y que mientras tanto,
yo 
me sigo acordando 
y (sin entenderlo)
te sigo queriendo.